20060613

La Vida como Narrativa (parte 1)

Al analizar el caso de la señora Alicia, una mujer soltera, de 47 años, proveniente de Valdivia. Que actualmente vive en Santiago, en precarias condiciones en un departamento interior en el patio de su cuñado, junto a dos de sus seis hijos y que acusa malestares como jaquecas reiteradas, desánimo generalizado y ganas de desaparecer; además de esto, relata estar sintiendo algo diametralmente opuesto: La señora Alicia cuenta vivir “episodios de ira que desencadenan la rabia eufórica”, que descarga contra sus hijas o bien contra ella misma.

Por todo esto y otras cosas, el psiquiatra la diagnosticó con un Trastorno Mixto Ansioso-Depresivo con Crisis de Pánico; así mismo, la señora Alicia se describe como “la mujer que el sistema olvidó”.

Los seres humanos somos seres interpretantes (Anderson, H. 1997; Bateson, G. 1972; Bruner, J. 1986; Derrida, J. 1978; Epston, D. y White, M. 1992; Foucault, M. 1980; Gergen, K. 1994; White, M. y Epston, D. 1990), vamos moldeando nuestras experiencias a medida que nuestra limitada estructura va percibiendo los estímulos que pueden ser captados mientras vivimos nuestras vidas.

Estas experiencias sólo se pueden moldear en la interpretación, si reconocemos la existencia de algún marco de inteligibilidad que brinde el contexto para el vivenciar de la experiencia y la atribución de significado a éstas. (White, M. y Epston, D. 1990)

¿Cuál sería el marco de inteligibilidad que contextualiza nuestro vivenciar y nos permite el significar? Para mí, son los relatos. Las Narrativas.

Los procesos de interpretación, significación, resignificación y rememoración[1], no son neutrales en cuanto a sus efectos en nuestras vidas, sino que tienen efectos reales: influyen en las decisiones que tomamos y en las emociones que expresamos; por decirlo de una manera más global: intervienen en los pasos que damos por los caminos que elegimos seguir.

Estas narraciones del sí mismo actuarán como las determinantes de cuales serán los aspectos que se expresarán de nuestra experiencia vivida; así mismo, en el historiar de los relatos se determinará la forma de expresión de la versión de la experiencia vivida.





[1]Con el neologismo ‘rememoración’, me refiero al proceso de evocar, recordar y revivir la significación del experienciar, en un sentido más amplio que el simple y clásico ‘recuerdo de la memoria’. La rememoración no es una mera recuperación de información desde una unidad de almacenaje. Es el revivir la experiencia a través del poder que tiene la narración de ésta. Vittorio Guidano trabaja con la rememoración en su técnica post-racionalista de ‘La Moviola’ (1994).

2 comentarios:

Unknown dijo...

Creo que es importante destacar que el proceso de rememoración siempre está relacionado con alguna forma interpretativa y de significancia para el sujeto que experimenta. De este modo, nunca se debe olvidar que el recuerdo y el momento en que se recuerda dan matices que pueden, en la práctica, cambiar completamente lo "inteligible" de un hecho. Para un observador esto debe ser fundamental a la hora de enfrentar una "observación" del pasado a través de una mente humana y, además, se debe considerar la tercera variable involucrada en el momento que se observa: los procesos significativos e interpretativos, siempre presentes, del propio observador.

Irkaahn-Oberek Zortsung dijo...

Sin duda alguna, el proceso rememorativo está vinculado al marco de inteligibilidad del ser humano, el mismo marco que le permite hacer distinciones y significaciones de todo tipo.
Y sin duda alguna, el momento actual de la rememoración o de cualquier interpretación juega un rol fundamental en el resultado de ésta, debido a que es el contexto quien delimita ciertas restricciones, las que generan una desigualdad de probabilidad de ocurrencia de una u otra cosa (acción o pensamiento). Y obviamente hay que considerar que la interpretación de dicho contexto que brinda las restricciones concomitantes, dependen exclusivamente del devenir histórico, social, económico, político, biológico, etcétera, del sujeto interpretante.